Por Redacción
Zamora, Michoacán.- Derivado de la falta de apoyos para el campo, ganaderos de la región Zamora, han denunciado la creciente demanda de carne “barata”, es decir, obtenida de animales que mueren atropellados, por enfermedad, por accidente, ahogados en el parto o por picaduras de insectos, llamados “angelitos” lo que podría implicar un riesgo sanitario.
De acuerdo a una investigación realizada por “El Independiente” de Zamora, este tipo de carne, se distribuye principalmente a taquerías, birrierías, fondas y puestos callejeros a precios que no superan el 10% de lo que cuesta la carne que sale de los rastros.
No obstante, reconocieron que el sector ganadero afronta una difícil situación, dada la falta de apoyos, por lo que en lugar de enterrar a los animales muertos o enfermos, los “zopilotes” esperan a que mueran y después adquieren al animal muerto para revenderlo hasta en mil pesos, mientras que uno de canal, vale cerca de 33 mil pesos.
La carne de “angelitos” se puede reconocer por ser más dura, tener un color violáceo y al ser cocinada, se pone negra, a diferencia de la carne de rastros.
Uno de los principales riesgos a la salud que tiene esta carne es el hecho de que, al provenir de animales enfermos o que están al borde de la muerte, pueden haber sido medicados para tratar de salvarlos, y dichos medicamentos podrían pasar a las personas que consuman la carne.
Con información de “El Independiente” de Zamora