Por Lucía Castillejas
Morelia, Michoacán.- El exceso al cazar un ave del lago de Pátzcuaro, la cual migra desde Canadá, ha puesto en riesgo un platillo típico de la región de Tzintzuntzan, ya que se ha puesto una vida desde Canadá para la protección de la especie. El pato es de la variante gallareta, y el platillo se llama pato de ánimas.
Blanca Villagómez, cocinera tradicional de esa región lacustre de Michoacán, manifestó que en esta ocasión, para la Noche de Muertos, fecha en la cual se realiza este platillo que lleva todo un ritual, desde la cacería hasta su elaboración, solo pudieron tener dos patos, los cuales se utilizaron para llevar a cabo el rito y cocinarlos, además de explicarles a los turistas este ritual.
Otros años hay mayor venta de este platillo, dijo, y se degusta entre mucha gente, sin embargo esta ocasión la veda ocasionó que no hubiera patos, ya que las aves llegaron desde el norte del continente con anillos de rastreo, colocados en Canadá, por lo que está prohibida su caza y de hacerlo, la sanción puede ser hasta la cárcel.
Los cazadores de la región lacustre recibieron un documento, un poco antes de la fecha de Noche de Muertos, donde se explicaba que quedaba prohibida la cacería de esta variedad, so pena de enfrentar cargos graves.
Ante esta situación, la cocina tradicional dijo que buscarán variantes. Ya se estudian algunas como la realización del platillo con otra especie de pato que pueda ser de crianza, e incluso con pescado del lago de Pátzcuaro, pero terminaría el ritual que lleva hacerlo, y con ello se perdería la verdadera identidad del platillo.
No obstante la situación, la cocinera tradicional manifestó que también era importante el cuidado de la especie, porque ya ocurría que algunos cazadores entraban al lago e incluso ya hasta por deporte cazaban al ave, lo que empezó a disminuir su población y esto llevó a que la protegieran.
