Por: Dulce Sol
La conquista y la corona española no solamente trajeron consigo el nacimiento de los tacos de carnitas, aportaron también una nueva religión y cosmovisión al pueblo de México. Por ello es que somos el segundo país con más gente católica en el mundo, solo dejamos atrás a Brasil. A través de los años su moral ha impregnado a las familias y en algunas ocasiones hasta se ha mezclado con la política de la nación. Incluso en su momento Benito Juárez tuvo que separar la iglesia del estado. En la actualidad estos dos tópicos están juntos pero no revueltos.
En general cuando se habla de derechos a veces se suele mezclar la moral o las costumbres, sin embargo es menester de todas las sociedades reconocerlos como humanos. De acuerdo a la Comisión Nacional en la materia estos no solo se deben respetar, sino también garantizar. Y es aquí cuando puede entrar la confusión y la controversia cuando la mujer desea decidir sobre su cuerpo. Por lo que vale la pena mencionar algo que quizá es sabido o ignorado y son los Derechos Sexuales y Reproductivos.
Es imprescindible destacar y reiterar que tanto mujeres como hombres tenemos el derecho a decidir en nuestro cuerpo, nuestro erotismo y nuestro afecto, por lo que los derechos sexuales están relacionados con la el respeto, la libertad, la empatía, la igualdad y la autonomía. Y estos derechos son también humanos, es decir están protegidos por tratados nacionales e internacionales.
Su conocimiento implica que las personas puedan exigir su efectividad a las instituciones correspondientes. Por consiguiente deben ser avalados por los gobiernos y sus instancias. Promoviendo así su garantía. Pero a todo esto ¿Cuáles son los Derechos Sexuales y Reproductivos? Se enlistan a continuación:
- Decidir sobre mi cuerpo y mi sexualidad
- Ejercer y disfrutar mi sexualidad
- Manifestar mis afectos públicamente
- Decidir con quién o quienes me relaciono
- Respeto a mi privacidad e intimidad
- Vivir libre de violencia
- Decidir sobre mi vida reproductiva
- Igualdad
- Vivir libre de discriminación
- Información sobre sexualidad
- Educación integral en sexualidad
- Servicios de salud sexual y reproductiva
- Identidad sexual
- Participación en políticas públicas sobre sexualidad
Es importante enfatizar el que invita al disfrute de la sexualidad, pues quizá es uno de los menos respetados, incluso por las propias mujeres pues 8 de cada 10 mujeres no alcanzan el orgasmo con la penetración, esto de acuerdo a los estudios recientes realizados por la Universidad de Kansas en USA. Y ya ni hablar del derecho por la información sexual o la vida sexual libre de violencia, además de todos los restantes.
Datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), revelaron que México ocupa el primer lugar en embarazo infantil. Cada día 30 niñas entre 10 y 14 años dan a luz. Este dato debería demostrar que el mejor camino es la prevención a favor de la socialización del conocimiento, la desestigmatización y la descriminalización social. Aunque en el marco vigente en la mayoría de los países de se limitan el acceso a los servicios de salud y al criminalizar la práctica se presentan muertes que bien podrían evitarse y sufrimientos que podrían prevenirse.
Cuando se tocan temas polémicos se suele perder el foco de la discusión y a veces se olvida que ni siquiera deberían ser tema de debate, puesto que no depende de moral o creencias, toda vez que organismos mundiales, gobiernos e instituciones ya los avalaron como un derecho. Como sucedió desde hace 12 años en la Ciudad de México en donde se practica la (ILE). Una de las organizaciones que apoya la práctica es Fondo María.
En otros estados si la ley cuenta con diferencias en respetar el derecho de acuerdo a las causales se puede asistir a buscar legalidad y seguridad con Helpmorras en Aguascalientes, Dser en Puebla, Las libres en Guanajuato, Divulvadoras en Morelos, Red Desser en Quintana Roo y Católicas por el Derecho a Decidir en casi en toda la República.
Para finalizar replicaré el mensaje de una usuaria de Twitter: “Quizá en la CDMX las quesadillas no lleven queso, pero el matrimonio igualitario y el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo sí llevan despenalización”.
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