Por Rubén Alcantar
Morelia, Michoacán.- Uno de los ingresos más importantes para nuestro país son las remesas familiares, las cuales no son más que, el dinero que envían nuestros compatriotas, desde los Estados Unidos a sus familias, para de esta manera dar el sustento a estos hogares; las remesas familiares resultan importantísimas para nuestro país, pues tan solo el año pasado, estas rebasaron los 33.6 mil millones de dólares a nivel nacional,cerca del 3% de nuestro PIB Nacional, de los cuales 3.4 mil millones de dólares llegaron a nuestro Estado, algo así como, casi el 10% del total nacional, lo cual representa casi el 15% de nuestro Producto Interno Bruto Estatal de acuerdo a las cifras del INEGI y el Banco de México.
Sin duda estas famosas remesas resultan ser un ingreso VITALICIO para nuestro Estado, y a pesar de que, en términos económicos, se debiese buscar la manera de reducir poco a poco la dependencia de este ingreso, y fomentar alternativas para generar el crecimiento económico de manera interna, resulta actualmente imposible lograr esto,dado la gran dependencia que al menos nuestro Estado tiene sobre estas.
Es precisamente por esta enorme dependencia, que la preocupación llega a este escritor actualmente, los contextos cambian, y sin duda el contexto político en Estados Unidos se encuentra sacudiendo a nuestro país, y las remesas son uno de los que más me preocupa y menos se habla.
Este tambaleo no se ha dado únicamente por el discurso antinmigrante del presidente Trump, el cual sin duda, entre sus seguidores recibe gran aceptación, hecho que pudimos corroborar con las medidas arancelarias interpuestas por este mismo, suceso que resulto benéfico para su popularidad y sin duda prejuicioso para nuestros productores y exportadores.
El malestar de Trump en este tema, es hasta cierta medida entendible, claro que las remesas resultan una fuga de capitales, capitales que no se invierten, ni tampoco se ahorran en los Estados Unidos, mermando de esta manera la actividad económica. Capitales que de acuerdo a Pew Research en 2017 ascendieron a más de 148 mil millones de dólares, dinero que salió a manera de remesas de los EUA al resto del mundo, de los cuales como ya mencione más de 33 mil millones fueron a parar a nuestro país, sin duda una cantidad bastante considerable.
Este suceso, ha sido uno de los tantos discursos políticos del presidente Trump, hecho que entre sus principales repercusiones pudiese traer, como ya lo ha mencionado anteriormente, la enorme posibilidad de imponer impuestos a las remesas, alegando que estas reducen el consumo, ahorro e inversión en su país; hecho que sin duda mermaría de manera significativa nuestros ingresos, tanto Nacionales, como Estatales.
El tema para nosotros ya no radica tanto en las cuestiones externas, sin duda son circunstancias que no podemos contener, la problemática se ubica, por supuesto, en el hecho de la enorme dependencia de estos ingresos, dado que es esta dependencia la que nos vuelve demasiado vulnerables ante las externalidades, las remesas son sin duda un asunto que debiese preocuparnos en demasía, y debiese el gobierno realizar dos acciones en este estricto sentido, comenzar como lo mencione al inicio, a fomentar alternativas para generar el crecimiento económico de manera interna, y sin duda apelar de manera política, principalmente en el T-MEC, el que este impuesto no llegue a volverse una realidad, de lo contrario, sin duda habría que alarmarnos de un golpe más a nuestra ya de por si lastimada actividad económica, pongamos mucho ojo, porque se ha encendido la alarma en las remesas.