Por: Morelia, Patrimonio de la Humanidad, AC.
Morelia, Michoacán.- Ante la difícil situación económica que estamos viviendo, fruto del Covid 19, es tiempo de apoyarnos entre todos, Morelia Patrimonio de la Humanidad, A. C., les invita a consumir “AHORA”, en nuestros comercios locales, en las tienditas del barrio, ya que son cerca de 200 comercios en el Centro Histórico de Morelia, los que no pudieron sobrevivir, teniendo que cerrar sus puertas a partir del 1° de junio de este año, los giros comerciales afectados van desde: bares, tiendas de artículos religiosos, zapaterías, dulces regionales, tiendas de ropa, imprentas, entre otros; compartió con este portal Alfonso Guerrero Guadarrama, presidente de la Asociación de Comerciante y Vecinos del Centro Histórico.
No deja de llamar la atención como el centro de Morelia está perdiendo su identidad al ir desapareciendo comercios, engullidos por franquicias y tiendas de grandes corporaciones. Ya no tenemos la tienda típica de 1940, ahora hay un local que es igual en muchos más locales franquiciados como los OXXO, por citar un ejemplo. En muchos de los casos, los propietarios de las antiguas tienditas, son gente mayor, y ven como está languideciendo su fuente de ingresos. “Es momento de unirnos y apoyarnos, consumamos lo local, compremos en esos pequeños negocios, que son fuente de ingresos de muchas familias, de esta manera estaremos ayudando a fortalecer nuestra economía y nuestra identidad” expresó la Dra. Esperanza Ramírez Romero, presidenta de Morelia Patrimonio de la Humanidad A. C.
Morelia está dividida en cuatro sectores, mismos que se fueron definiendo desde el siglo XVI. El sector Nueva España, con su plaza que antiguamente fue el atrio en donde esporádicamente se enterraba a los fieles al no haber espacio dentro de la iglesia; atrás del convento de San Francisco, estaba la escuela de San Miguel, y por supuesto, no podía faltar la tiendita del barrio, bien surtida, a donde acudían los vecinos a comprar y socializar. Actualmente han desaparecido muchas tiendas en este sector, mismas que por generaciones vivieron de sus ventas. Hoy sobreviven La Perla de Urapa, El Porvenir, Casa Saavedra, la Farmacia Homeopática, una tienda de materiales eléctricos en la esquina de Vicente Santa María y la calle Humboldt.
El sector Independencia, en cuyo centro está el templo de San Agustín con su atrio, que después se convirtió en cementerio, al igual que sucedió en San Francisco y posteriormente fue mercado. Dice una tradición, que, en la esquina de Corregidora y García Obeso, había una “tiendita”, donde la madre de José María Morelos y Pavón, nuestro prócer nacional, dio a luz.
En este sector Morelia Patrimonio de la Humanidad A. C., te invita a visitar las dulcerías tradicionales, que aún están dentro de las casas, entre las calles de García Obeso y Corregidora, o a saborear las deliciosas gelatinas de jerez y el pan tradicional de la Cerrada de San Agustín.
El sector República con su templo de Las Rosas y un espacio abierto, que más tarde se convirtió en una bella plaza, único contacto de las niñas del colegio con el mundo, mientras tenían su recreo en la galería arqueada del segundo piso. La tiendita no podía faltar, para cubrir las necesidades inmediatas y así evitar ir al centro de Morelia. Hoy en día este sector es uno de los más socorridos, pero también de los más cambiantes por comercios nuevos. Aún quedan entre los más antiguos, la zona hotelera frente a Catedral, que hoy vive gracias al consumo en sus restaurants y cafeterías como el Café Catedral, Hotel Casino, entre otros, y que visitarlos se ha vuelto una tradición. Otros espacios que son igualmente emblemáticos y que están sobreviviendo gracias a grandes esfuerzos son: El Corral de la Comedia, La Casona del Teatro, El café del Prado, que resurge con cosas interesante, Foto Estudio Olympia, etc.
El sector Revolución, con su pequeña capilla de San Juan, y en su entorno un cementerio, tampoco ahí podía faltar la tiendita del barrio, la cual era muy útil, ya que el centro de la ciudad estaba algo lejos.
Las tienditas del Centro están siendo desplazadas por cadenas de tiendas más grandes y mejor surtidas, cuyo beneficio económico se va fuera de nuestra localidad, y ahora con la pandemia, las que aún quedan, están muriendo lentamente. Los apoyos en créditos por parte del Estado y del Municipio, respectivamente gestionados en las dependencias de SEDECO y SEFECO a través de Si Financia, son financiamientos de 6 000 pesos, que son utilizados para pagar salarios y que resultan un complemento para atender necesidades pero no son suficientes, complementó estos datos Alfonso Guerrero Guadarrama.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), cada vez al viajar más se buscan los lugares típicos o tradicionales desde la gastronomía y ciertad compras artesanales. Entonces, ¿si siguen desapareciendo las tiendas familiares donde quedará la esencia de cada ciudad?
El comercio tradicional da estabilidad, crea empleo y mejora la economía de las ciudades y del país en general. Algo que se debe enfatizar, es que los establecimientos de barrio de toda la vida, deben preservarse, ya que fomentan la inversión local y generan identidad.