Por: Redacción
Morelia, Michoacán. – No habían transcurrido tres horas de que criminales mataron a un hombre para robarle su dinero, cuando los paramédicos de la Policía Morelia salieron a toda prisa, ahora un joven de apenas 22 años se desangraba en la calle Mariposa, de la colonia Gertrudis Sánchez.
El joven Marco no quiso entregar su bicicleta y una pulidora, ambos sus herramientas de trabajo, a delincuente, triste decisión, porque no solo le quitaron lo que con su trabajo había pagado, también lo “picaron”, como se dice coloquialmente.
Cuando llegaron al lugar, el muchacho tenía la espalda y pecho cubiertos de sangre y la camisa pegada a su cuerpo enjuto, pero ¿y el responsable? Nadie lo vio y menos lo detuvo.