Elena Guarin/Estenógrafo
Morelia, Michoacán. – Agotada de la parranda del día anterior, una joven mujer se acomodó a echarse una siesta en la cajuela de su vehículo, en la colonia Molino de Parras, sin embargo antes de que se le pasará la fiesta le cayó la Policía Municipal, porque los vecinos asustados pensaron era una asesinada más de la ola de feminicidios que hay en la ciudad.
El nombre de la implicada no ha sido revelada, pero se conoció que hasta el Comisario Local acudió a verificar el reporte, se acercó hacía el sitio referido, pero no se esperaba lo que encontró ¡El casi fétido aroma característico a la resaca de alcohol mezclado con tabaco!
La supuesta víctima explicó a los oficiales “no quise seguir conduciendo y me faltaba mucho para llegar a mi casa, por eso mejor me quedé aquí”, palabras más palabras menos.
Ya con la certeza de que no había novedad, la persona fue invitada a retirarse, porque los vecinos de la calle Oaxaca.
Lo extraordinario, antes de siquiera confirmar el hecho, la Fiscalía Especializada en Homicidio Doloso en Agravio de la Mujer y Feminicidio.