Redacción/Estenógrafo
Uruapan, Michoacán. – Fracasaron nuevamente las negociaciones de la Unidad de Combate al Secuestro (UECS), la familia de la víctima confío en sus mediadores, pero el saldo fue negativo: el cadáver de la mujer fue encontrado con huellas de tortura entre los matorrales, frente a la Plaza Ágora en esta ciudad.
A la mujer antes de privarla de la vida le ataron las manos con cinta, lo mismo que casi todo el rostro con cinta adhesiva color gris.
A decir de mandos de la Policía de Investigación de Uruapan, los familiares confiaron en las autoridades, con todo y que había amenazas de no informar a la Fiscalía. Pero algo salió mal, al parecer no llegaron a un acuerdo del monto a pagar.
En cuerpo de la víctima fue encontrado en la esquina que forman las calles República de Panamá y República de Salvador, en la colonia El Colorín, a unos metros del Boulevard Industrial.
Este no es el primer caso, al menos no que se hace público, de un fallido intento de rescate de una persona secuestrada en Michoacán. El pasado 9 de enero, otro caso que investigaba la Unidad Especializada de Combate al Secuestro acabó en la muerte de la víctima, una joven egresada de la Universidad Michoacana, cuyo cuerpo fue encontrado en Jesús del Monte.
Así crece la lista de mujeres asesinadas, en total 60 en lo que va del año, es decir, un promedio de 20 al mes, siete casos más en comparación con el mismo período del 2019.