Cecilia Sierra
Morelia, Michoacán. – Los últimos casos mediatizados han dejado más que claro lo que todos sabemos, pero nadie comenta: los agresores de las mujeres son sus propios familiares y pasan en casa.
Quienes violan, golpean y matan a nuestras mujeres no son, al menos no generalmente, personas desconocidas, son el padre, el padrastro, el hermano, el tío, el abuelo o el profesor, ¡tu vecino!, en el caso de las menores; y el novio, padre o pareja, en el caso de las mujeres adultas.
Las recomendaciones de las personas y autoridades suelen ser que no se tránsite por calles desconocidas u oscuras, pero lo que no te dicen es, ¡Cuídate de los hombres de tu familia, cuída a tus niñas y adolescentes de su padre, de tu hermano y de los hombres que hay en tu casa! Porque el riesgo no esta en las calles, el más letal, esta en tu casa, en esa que habitas y llamamos con amor: hogar.
Retomemos.
- – Satya, víctima de feminicidio; el agresor fue su entonces pareja, además fue revíctimizada por medios de comunicación locales.
- Menor de 11 años, vecina de la colonia El Porvenir, fue encontrada muerta de 30 puñaladas en Tarímbaro; el feminicida resultó ser su vecino, persona de su confianza.
- Guadalupe Campanur, activista social, miembro de la guardia comunitaria de Cherán y defensora de los bosques, fue asesinada por su ex novio y abandonado su cuerpo en la carretera.
- Vianey H., fue golpeada brutalmente por su pareja y, aún estando viva, la bañó en gasolina y le prendió fuego; la mujer murió en el hospital a causa de las quemaduras.
- Joselyn M., menor de 11 años, murió a manos de un familiar; a la menor no solo la abusaron sexualmente y la golpearon, también intentaron desaparecer su cuerpo en una fosa cavada bajo la cama del feminicida.
- Ana Luz, pequeña de 11 años, murió a manos de su hermano en mayo de 2019; le propinó nueve golpes y después la degolló.
- Alejandra, madre soltera, murió a machetazos, en plena vía pública, el feminicida: su entonces pareja sentimental.
- Fernanda, joven de 17 años; fue secuestrada y asesinada por dos de sus mejores amigos.
- Jessica González Villaseñor, murió a manos de Diego Urik M., su pareja sentimental, quien abandonó su cuerpo en la vía pública.
- Frida Santamaría, Sahuayo, su pareja sentimental le disparó, pero salió libre, ya que aseguró fue un accidente, se le salió el tiro.
- Irma P., asesinada en febrero en su casa, a manos de su propio hijo, quién la apuñaló directo en el corazón; no tuvo oportunidad de defenderse, no forcejeo.
Todos celebramos la condena de 50 años de Jessica González Villaseñor, pero el caso fue tan mediatíco y tan intenso, de jornadas tan prolongadas en las salas, que nos olvidamos de otros casos, de otras víctimas, de otros feminicidas que tampoco deben ser olvidados ni aprovechar el desaseo mediatíco para que no se recuerden sus nombres.
La pregunta es entonces, ¿qué estan haciendo las autoridades para llevar la concientización a las mujeres y las familias? Porque las muertas las ponemos nosotras, las mujeres, las sentencias, hasta ahora, las ha logrado la Fiscalía General del Estado, pero ¿y dónde esta la 4T? ¿y el cambio? Los feminicidios no han cesado desde aquel 1 de octubre del 2021 en Michoacán.
