Por Milena Suástegui
A todos nos gusta tener un cutis limpio de imperfecciones, pero en lograrlo es lo que se complica, debido a que no siempre tenemos tiempo, los ingredientes necesarios o los recursos.
Sin embargo, en este tiempo de cuarentena provocada por COVID-19, es muy buena oportunidad para cuidar nuestra piel y cuando todo regrese a la normalidad, salir a la calle con nuestro rostro super bonito.
Es por eso que les comparto estas tres maravillosas mascarillas que tienen demasiados beneficios sobre nuestra piel, pero es importante mencionar que por lo menos tenemos que realizar una a la semana para tener mejores resultados.
1. MASCARILLA EXFOLIANTE DE MIEL Y ALMENDRAS
Esta opción es para aquellas personas que necesiten una exfoliación ya que en su cutis cuentan con piel muerta o acné y es una de las mejores mascarillas caseras para la cara.
Para esta mascarilla facial, solo será necesario una cucharada de miel, una cucharada de zumo de limón y dos almendras trituradas.
Se mezcla bien la miel con las almendras trituradas y añadimos una cucharada de zumo de limón, mientras se crea una masa con grumos que esparciremos en nuestro rostro.
Masajearemos nuestra cara con delicadeza para no irritar la piel y con movimientos circulares activaremos las células de nuestra cara.
Acto seguido, la dejaremos reposar durante unos 15 minutos en nuestro rostro y enjuagamos con agua tibia. ¡Y listo, eliminaremos las impuresas!
2. MASCARILLA EXFOLIANTE DE BICARBONATO
En este caso, se mezcla una cucharada de bicarbonato, con una de sal y 2 de miel.
Una vez que la mezcla esté hecha, se aplica y se masajea con movimientos siempre circulares marcando sobretodo la zona T.
Sin embargo, si se tiene la piel muy seca o sensible, se recomienda no hacerlo con agresividad ya que puede irritar la piel.
Finalmente, se deja reposar durante unos 10 minutos y ¡listo! Enjuagar con agua tibia y disfrutar de una piel suave y limpia.
3. MASCARILLA ANTIARRUGAS
El ingrediente estrella de este tipo de mascarilla casera es el huevo, ya que es un ingrediente rico en colágeno y hará que nuestra tez se vea más firme y tensa.
La preparación de esta mascarilla antiarrugas consiste en separar la clara y la yema de un huevo.
En el recipiente donde esté la yema, echaremos una cucharada de miel, dos de leche y mezclaremos bien.
Mientras tanto, batiremos la clara del huevo y una vez tengamos todo, primero aplicaremos la clara de huevo sobra la zona del cuello y contorno de ojos; y luego, la mascarilla de la yema por todo el rostro.
Dejaremos secar la mascarilla facial 10 minutos y enjuagaremos el rostro con agua tibia.
Una vez tengamos la cara limpia, volveremos a repetir el mismo procedimiento hasta dos veces más para mejor efecto.
Es un poco raro hacer esta mascarilla debido a que lleva huevo, es olorosa y nos pudiera dar asco, pero una vez que vemos los resultados y beneficios, no vamos a querer dejar de hacerla.