Por Redacción
Morelia, Michoacán.- El comisario de Morelia, Julio Cesar Arreola Guillén, defendió su reputación y trayectoria en materia de seguridad pública, al aclarar que la queja interpuesta en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) donde se le acusa de haber golpeado a varios policías, ni fue en contra suya, ni tuvo un dictamen desfavorable para él.
Lo anterior, luego de que Estenografo.com, publicó la queja de la CEDH interpuesta en 2014 en contra del comisario, donde se expone que cuando fue mando policial en la Unidad Especializada de Combate al Secuestro, incurrió en una detención ilegal seguida de supuestos golpes contra sus subalternos.
Al respecto, el comisario afirmó que “he estado en algunas otras instituciones laborando y como servidores públicos obviamente estamos expuestos a algunas quejas por parte de la ciudadanía”.
Detalló que el incidente es un tema que se trató en el 2014, y que el dictamen lo eximió de cualquier responsabilidad legal, pues la queja en la CEDH “fue de manera general, no fue nada personal con su servidor, la autoridad competente tomó cartas en el asunto, sin llegar a una conclusión dañina para mi persona o la institución, ya que todo se hizo en apego a la legalidad y derecho. Entonces es una cuestión que no paso a mayores”.