Por: Redacción
Morelia, Michoacán. – Pese a que se ha querido demeritar la investigación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), con declaraciones como que el torturado era “secuestrador” y “cortadedos”, confirmaron voces oficiales que la recomendación continúa en contra del recién nombrado subsecretario Ricardo Delgado Castellanos.
Además se aclaró, la recomendación no es por tortura es “por tratos crueles, inhumanos y degradantes” ¿En qué se diferencia de la tortura? En que le pusieron su calentada, con bolsa y chicharra, por mero gusto, porque ya estaba detenido y nada tenía que confesar ¡Fue por mera diversión!
Los expedientes de la Fiscalía de Baja Californía advierten que entregaron al sospechoso limpio, sin golpes y conforme los protocolos, pero apenas fue a parar a manos de los mandos ministeriales todo cambio. Cuando llegó a Morelia ya estaba pasadito de golpes, según lo certificados médicos estudiados por los expertos de la CEDH.
Sobre su recomendado, José Martín Godoy salió con la puntada de qué habían enviado una carta aclaratoria a medios de comunicación, es decir, los meses ocupados por los expertos en derechos humanos que trabajan en la Comisión Estatal de Derechos Humanos fueron tirados a la basura porque ellos dicen que no pasó.
“Se trata de una persona que fue acusada de secuestro, que tenía relación con cinco secuestros, fue consignada… y bueno, la estrategía de defensa es que me torturaron”, explicó el secretario de Seguridad Pública, quien curiosamiente era procurador en ese entonces y que se negó a aceptar cualquier queja en contra de los cinco elementos implicados.
La investigación de la CEDH que derivó en la recomendación, se basa en los certificados médicos y lo más importante en el máximo protocolo para estos casos, hablo del de Estambul, mismo que arrojó se habían cometido en contra del Pille o El Lic tratos crueles, inhumanos y degradantes, es decir, incurrieron en el uso excesivo de la fuerza.
El testimonio de El Lic ya nunca se sabrá, porque fue asesinado a balazos por otro sujeto que esta interno en el penal de Delitos de Alto Impacto el pasado mes de marzo; Juan Carlos A., acusado de secuestro, también se presumía era operador del mismo Enrique Plancarte y que se hacía pasar por empresario de la construcción en el norte del país.
Dentro de las dinamicas de las corporaciones policiales es común aun esta práctica, las golpizas, para sacar la verdad o como escarmiento, sin embargo, el que sean o no criminales o sospechosos no lava la culpa, porque si la ley establece que es un delito la tortura y el uso excesivo de la fuerza, luego entonces, lo natural es que sean las corporaciones policiales quienes respeten y hagan valer la ley, y no salirse con el argumento de que era secuestrador y cortadedos ¿No cree usted?