Cecilia Sierra
Morelia, Michoacán.- No hay móvil del crímen, al menos no pública, que haga suponer una relación entre el crímen organizado y las 11 víctimas asesinadas el pasado 1 de noviembre en Tangamandapio.
En la información revelada por el fiscal de Michoacán, Adrián López Solis, se conoció que eran 11 cortadores de aguacate, originarios de Tarecuato, tenencia de Tangamandapio, quienes lamentablemente llegaron a territorio peleado por diferentes células delincuenciales.
“Son 11 personas, 6 de ellos menores de edad. De acuerdo a la versión de los familiares, todos se dedicaban al corte del aguacate, habían terminado su jornada de trabajo de ese día y se juntaron para ir al cerro a buscar panales de abejas, dado que ahí tienen la costumbre de colocar estos panales en las ofrendas de muertos de esa zona”, explicó.
Las víctimas salieron de su domicilio con miras a ir a ver un apiario que tenían en el cerro y jamás volvieron. Durante la noche del Día de Muertos, fueron localizados todos sin vida, con el tiro de gracia, junto a una camioneta pick up, 5 eran adolescentes de entre 14 y 17 años.
