Ciudad de México. – El actual subsecretario de Desarrollo Policial y Seguridad Pública, Jesús Rogelio Gámez Tamayo, fue señalado por la Auditoria Superior de Sinaloa de haber cobrado 19 cheques en la Secretaría de Seguridad Pública de Sinaloa, entre estos cuatro por montos de 50 mil pesos, de acuerdo con el medio Noroeste.
Gámez Tamayo, mano derecha del actual titular de la Secretaría, José Alfredo Ortega Reyes, recibió un total de 613 mil 870 pesos de parte de la Secretaría, pero no fue el único, hubo otros funcionarios de igual o mayor rango que en 2017 accedieron a recursos de la dependencia sin aparente justificación.
Todo apunta a que la maestria en Inteligencia y Seguridad Nacional que presume el secretario José Alfredo Ortega Reyes le jugó otra mala pasada, como aconteció con José Luis García Sierra, del que ignoraba su pasado en los video escandalos con el criminal Servando Gómez la Tuta.
Además Gámez Tamayo, de acuerdo a fuentes de la Fiscalía General de Justicia Militar, también fue investigado por el aparente “suicidio”, de Héctor Cstañeda Sainz, implicado en la dquisición de equipo de forma irregular a los Estados Unidos, y con quien trabajaba Gámez Tamayo, como el jefe de la sección administradora de contactos.
Pero no solo fue el pasado, no aclarado de Gámez Tamayo, lo que debería de preocupar al secretario y al Gobierno de Michoacán, sino los malos manejos hechos al interior de la Secretaría de Seguridad Pública y que dejará un boquete financiero incalculable para la dependencia.
En su paso por Asuntos Internos argumentanto “limpia” de la Secretaría, despidió a más de 100 elementos y personal administrativo que se encontraba en funciones, lo que derivó en igual cantidad de demandas en los tribunales laborales y que apuntan ganarán todos los trabajadores por presuntas violaciones a sus derechos como trabajadores y humanos, es decir, millones en perdidas a la Secretaría.
Ahora como subsecretario de Desarrollo Policial y Seguridad Privada, nuevamente falló a la politica pública del mandatario estatal, que busca que los recursos gesstionados o otorgados por la Federación se queden en el estado, porque los ha entregado a sus cuates de otros estados.
Sin licitación previa, entregó 38 millones de pesos para capacitar a aproximadamente 300 elementos al Instituto Superior de Seguridad Pública del Estado de Sonora, dirigido por Ellioth Romero Grijalva, mano derecha de Alfonso Durazo durante su paso por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, de quien también dependió en su momento, el secretario de Seguridad de Michoacán José Alfredo Ortega Silva.
El recurso se entregó en tantos de 12 millones de pesos, provenientes del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública de los estados, pero que por la suma de dinero, debió licitarse, en caso de no concertarse con el Instituto de Estudios Superiores en Seguridad Pública, dirigido por Julissa Suárez Bucio, institución que si cuenta con cursos de formación inicial, continua y otros de alta dirección y especializados.