Morelia, Michoacán. – Desolada y llena de basura, es como luce la calzada Juárez de Morelia; el Ayuntamiento capitalino, desde la administración de Alfonso Martínez Alcázar, ha dejado morir cientos de lavandas y árboles que fueron sembrados para embellecer esta popular avenida.
La irresponsabilidad de los vecinos y la omisión del Gobierno de Morelia, han llevado a que hoy la calzada funcioné también como depósito de basura, baños públicos y punto de encuentro para consumir bebidas embriagantes, como lo hacen notar los vestigios de cartones de cerveza y botellas de la espirituosa bebida.
A lo largo de su recorrido las bancas disponibles están sucias, con olores a orines, heces fecales, de todo tipo; pañales, toallas sanitarias y árboles tristes, secos; las lavandas que un día engalanaron la calzada están secas o parcialmente arrancadas; este es el ambiente que respiran los morelianos que llegan a correr.
Los depósitos de basura están rotos, llenos o desbordados, cuando bien les va, porque algunas papeleras ya fueron robadas.
Aunado al evidente abandono de la parte de ornato, esta la basura, orgánica e inorgánica, junto con la tierra tapando algunas coladeras, que hasta pasto ya han criado, en la zona colindante con la calle Martín Castrejón; total, faltan varios meses para que llueva.
Temá aparte son los desperfectos propios de la construcción, como los baches y fracturas en el concreto, que supuestamente costo 29 millones de pesos, cuando lo anunció el ex alcalde Wilfrido Lázaro Medina.